Os cuento que con este puré nos criaron a los 8 hermanos/as. A este puré le añadían proteína, carne pescado y huevos. Así no nos enterábamos de si había algún ingrediente que no nos gustaba. Madre mía que recuerdos me trae!
Es una receta fácil y muy rica que nos puede solucionar un entrante o una cena.
Es una receta fácil y muy rica que nos puede solucionar un entrante o una cena.
3 patatas medianas
100 gramos de guisantes.
2 zanahorias grandes
3 o cuatro hojas de lechuga(dependiendo de la variedad que usemos)
1 cebolla pequeña
2 cucharadas de aceite
sal al gusto
Agua(según como lo queramos de espesa)
Elaboración:
Se pelan las patatas, se lavan y cortan en trozos al igual que las zanahorias.
Se lavan las hojas de lechuga y los guisantes .
Colocamos una olla al fuego con el aceite, mientras se va calentando, pelamos la cebolla y la cortamos en rodajas muy finas.
Se rehoga la cebolla en aceite muy caliente hasta que esté dorada, en ese momento, se añaden todos los ingredientes, se mezclan bien y se cubren con agua. Se
dejan cocer hasta que esté muy deshecho.
dejan cocer hasta que esté muy deshecho.
Se rectifica de sal y agua si fuese necesario.
Se bate con una batidora hasta que quede un puré cremoso.
Te cuento un secreto:
A este puré le acompañábamos picatostes que se hacían friendo pan duro.
Como estamos muy ocupados/as, podemos comprar los picatostes que vienen hechos y aunque no son iguales, están muy buenos.También los hay con ajo y perejil.
Otra opción sería machacar pan tostado de ajo y perejil o tomate etc. encima del plato o taza.
Me gusta poner encima del puré un dibujito de aceite de oliva virgen extra y añadir trocitos de almendra, avellana rallada, pistachos etc. Esta vez he utilizado una mezcla de semillas variadas.
Si tenemos niños pequeños podemos añadir a este puré pescado desmenuzado o carne o cualquier ingrediente que creamos conveniente.
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