En mi casa siempre se hacían y recuerdo como mi madre las preparaba y hacía muchas porque con ocho hijos ya os imagináis la cantidad que tenía que hacer?
Este postre tiene el poder de hacer aflorar recuerdos familiares tan bonitos.
Plato fácil, rico y económico.
Ingredientes:
1/2 barra de pan duro
2 tazas de leche
2 huevos
Aceite de girasol
1 palo de canela
1 piel de naranja
2 cucharadas de canela molida
3 cucharadas de azúcar moreno
Elaboración:
Se pone la leche al fuego con una cucharada de azúcar, la piel de naranja y el palito de canela.
Se corta el pan en rodajas de 2 dedos más o menos.
Cuando la leche esté tibia, se introducen las rebanadas de pan, mientras tanto, se baten los huevos y se reboza cada una de ellas en el huevo batido.
Se pone una sartén al fuego con bastante aceite, cuando éste esté caliente, se van incorporando las rebanadas de pan y se dejan dorar por ambos lados.
Se coloca el azúcar en un recipiente y se añade la canela, se mezclan bien y se espolvorean las torrijas con esta mezcla.
Te cuento un secreto:
No empapes demasiado las rebanadas de pan con la leche porque de lo contrario se te romperán. Te lo digo por experiencia.
En vez de naranja puedes usar limón.
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